Autor: martin

Finalmente Apple presento la esperada mejora para su linea de notebooks, las Macbook Pro, estas ahora incorporan mejores procesadores y placas de video (aún no aptas para gaming) un estándar de memoria RAM de 8GB en adelante, un trackpad inmenso con force touch, un teclado tomado de la linea MacBook con tecnología “butterfly” y una pantalla más brillante, nítida y delgada, lo que nos trae al siguiente cambio, estas nuevas MacBook son aún más delgadas que la generación anterior, pero eso no es todo, otro de los cambios más notorios es la inclusión de una nueva pantalla en el equipo, una larga y angosta pantalla que reemplaza a las teclas de función en los modelos más caros de la nueva linea, se trata de la Touch Bar con sensor de huellas dactilares, esta es una pantalla de vidrio con tecnología retina que se encarga de mostrar botones y controles de acuerdo al contexto en el que se encuentre el usuario mientras utiliza el equipo, es decir, si este esta en Safari, va a poder acceder a sus favoritos desde dicha pantalla, ir para atrás, adelante y hacer búsquedas o si este se encuentra visualizando fotografías, los controles de edición aparecerán en la pantallita y así. El botón de encendido casi forma parte de esta pantalla, pero se ha separado unos milímetro y es un botón físico pero con un lector de huellas Touch ID para desbloquear el equipo al mejor estilo iPhone, lo que es bastante útil.

Hasta aquí todo bien, el tema es la tendencia actual de Apple de arriesgarse a empujar un estándar de conectividad de periféricos de forma brusca, como por ejemplo el caso de estos nuevos equipos que incorporan cuatro puertos Thunderbolt/USB-C, lo que deja afuera a una tonelada de periféricos con conexión ahora USB antigua y empuja al usuario o a comprar unos nuevos con este puerto que si bien no es nuevo, todavía no se ha estandarizado lo suficiente, o bien comprar además del equipo que cuesta sus buenos dólares, un adaptador para poder utilizar los actuales.

Sin dudas son equipos muy buenos, con un sobreprecio como siempre lo tuvieron pero si ya disponemos de uno de la marca, no es una mejora suficiente como para que nos lleve a cambiarlo.